Máxima (44) volvía a hacer gala de su fantástica sonrisa y su elegancia con un abrigo y una pamela en fucsia que al quitárselo dejaba al descubierto un vestido rojo fucsia sin mangas que resaltaba su figura, en la visita que hizo al Rijksmuseum en Amsterdam.
Máxima de Holanda sigue con su agenda, a pesar de la polémica desatada por la delgadez de la Reina.
Desde el pasado mes de septiembre, la reina de los holandeses ha causado sensación por su acusada pérdida de peso que, a juzgar de las imágenes de sus últimas apariciones públicas, no ha parado.
Lo cierto es que ha pesar de haber perdido 10 kilos y tres tallas, la reina Máxima nunca pierde su sonrisa.
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