La nueva versión de Daniel Sancho, última baza para evitar por todos los medios la condena a pena de muerte: “Edwin quiso violarme y me defendí”.
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Daniel Sancho rechaza a su nuevo abogado
Daniel Sancho continúa en prisión provisional en la cárcel de Koh Samui desde el pasado 2 de agosto, cuando confesó haber asesinado y descuartizado al cirujano colombiano Edwin Arrieta. “Soy culpable, pero yo era su rehén”, fueron exactamente sus palabras.
Tres meses después, continúa en prisión preventiva a la espera e que se fije la fecha del juicio tras ser acusado por la Fiscalía por “asesinato premeditado”. Unos cargos por los que podría ser condenado a cadena perpetua o a pena de muerte.
El próximo lunes 13 de noviembre tiene que volver a comparecer ante el juez después de escuchar los delitos de los que se le acusan. Es la segunda vez que se enfrenta a este trámite que tuvo que posponerse el jueves 26 de octubre después de que el hijo de Rodolfo Sancho exigiera a un traductor en la sala.
“Quiso violarme y me defendí”
Estas semanas han servido a su defensa para repensar una nueva estrategia. Según ‘Caso abierto’, ahora Daniel alegará que el cirujano colombiano quiso violarle y que él se defendió. Lo que no explicaría por qué cortó su cadáver en 14 partes y las fue desperdigando por la isla de Koh Phangan, donde sucedieron los hechos.
Una nueva línea de defensa con la que sus abogados buscan por todos los medios huir de la premeditación, un agravante que las leyes tailandesas castigan con la pena de muerte en el artículo 289.4 de su Código Penal. Según el citado programa, Daniel Sancho afirma que Edwin Arrieta intentó agredirle sexualmente: “Quiso violarme y me defendí”. También asegura que la víctima no aceptó su negativa y comenzó a actuar “de forma violenta”.
Daniel Sancho explica que ambos comenzaron una fortísima pelea que terminó con la muerte accidental del colombiano “al caer y golpearse la cabeza contra un mueble del baño de la habitación”.
Una versión que tendrá que explicar la próxima semana en una nueva vista en la que el juez le leerá los cargos de los que le acusa la Fiscalía tailandesa: premeditación del crimen, ocultación del cadáver y destrucción de documentación ajena. Daniel deberá aceptarlos o negarlos, aunque según las últimas informaciones todo apunta a que no los reconocerá.
“Daniel Sancho se dio cuenta de que había pactado con el diablo”
‘Caso abierto’ también da mas detalles de la relación que mantenían Daniel Sancho y la víctima. “Se conocieron por Instagram. Unas semanas después, Edwin Arrieta viajó a España para encontrarse físicamente con Sancho. Estuvieron en Madrid, Segovia e Ibiza, entre otros lugares“, afirman. El citado medio insiste en que todos estos encuentros en los mejores locales y hoteles fueron pagados “siempre” por el colombiano.
Al poco tiempo, según fuentes cercanas al acusado, “Daniel Sancho se dio cuenta de que había pactado con el diablo”… “Se convirtió en el objeto sexual de Arrieta y le obligó a hacer cosas que no quería”.
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