La pequeña Charlotte le ha robado el protagonismo a su bisabuela, la reina Isabel II en el tradicional Trooping de Colour, que este año además celebraba un día muy especial: el 90 cumpleaños de la Reina.
Un año más, Londres se vistió de luz y color con motivo de la tradicional ceremonia militar, conocida como Trooping the Colour, uno de los eventos tradicionales más espectaculares de la familia real británica, que forma parte de los festejos con motivo del cumpleaños de la Reina.
Este año era un día muy especial porque además la reina Isabel II celebraba una fecha muy especial: su 90 cumpleaños. La familia real al completo se unió a los festejos saludando desde el balcón del palacio del Buckingham Palace.
Sin embargo, la soberana inglesa se encontró con una “competidora” que le robó todo el protagonismo: su bisnieta Charlotte. La mejor de los hijos de los Duques de Cambridge, en brazos de su mamá, enamoró a todos con sus adorables gestos y reacciones. Y no pudo evitar asustarse por el ruido de la exhibición aérea. Junto a ella, su hermano mayor, el príncipe George, también siguió atento los aviones que participaban en el espectáculo, ante la atenta mirada y atenciones de sus papás.
Sin duda, un día inolvidable para la pequeña Charlotte, que se convirtió en la gran protagonista de su primer Troopping the Colour.
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