Una denuncia por presunta agresión sexual sin respaldo químico mantiene abierto el proceso judicial entre Paloma Lago y Alfonso Villares.
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El reciente informe toxicológico realizado a Paloma Lago no ha detectado presencia de sustancias asociadas a la sumisión química ni rastros de alcohol en su organismo. Las muestras fueron obtenidas el mismo día del presunto incidente, lo que otorga fiabilidad técnica al resultado negativo, según explican fuentes médicas y judiciales.

Sin embargo, los especialistas advierten que este tipo de pruebas tiene limitaciones temporales, ya que muchos compuestos pueden desaparecer del cuerpo en menos de 48 horas. Por tanto, la ausencia de evidencia no equivale necesariamente a la ausencia de exposición.
El contexto del caso: Versiones enfrentadas
El caso se remonta al pasado 27 de diciembre, cuando la presentadora fue hallada en su vivienda en un estado de confusión, según relató su entorno familiar. Fue su sobrino quien, alertado por Alfonso Villares —entonces conselleiro do Mar—, llamó a emergencias tras encontrar a Lago desnuda y desorientada.
Días después, Paloma formalizó una denuncia por presunta agresión sexual. El señalado, Villares, ha defendido su inocencia desde el primer momento y dimitió de su cargo para afrontar el proceso sin interferencias institucionales. La investigación sigue su curso en el Juzgado de Instrucción número 2 de Ferrol.
¿Qué implica un resultado toxicológico negativo?
El informe negativo no permite confirmar ni descartar de forma absoluta una posible sumisión química. Según expertos forenses, ciertos compuestos pueden ser indetectables si se eliminan del organismo antes de la toma de muestras. Además, los análisis están limitados a las sustancias incluidas en el protocolo de detección.
Por ello, la instrucción judicial continúa recabando otros elementos de prueba, como testimonios, peritajes y análisis psicológicos, que podrían aportar más luz al caso.

Apoyo familiar a Paloma Lago y prudencia mediática
Desde que se conoció la denuncia, Paloma Lago ha optado por mantener el silencio público, centrando su atención en el proceso legal y en preservar su intimidad. Su entorno más cercano, incluidos familiares como Ana Obregón, ha expresado públicamente su respaldo, subrayando la importancia de denunciar sin miedo ante posibles agresiones sexuales.
Camino judicial aún en desarrollo
Aunque el informe toxicológico no aporta evidencia incriminatoria directa, el procedimiento sigue abierto. Las comparecencias de las partes y los testimonios serán determinantes en los próximos pasos.
La complejidad del caso, sumada a su visibilidad pública, requiere especial cautela. La justicia debe actuar con imparcialidad y sin presión externa, respetando tanto los derechos de la denunciante como los del investigado, hasta que se esclarezcan por completo los hechos.
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