Una elección audaz entre lo clásico y lo contemporáneo revalida el dominio estilístico de la Reina Letizia en su visita a Montserrat.
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La reina Letizia acierta de nuevo con un vestido floral y alpargatas en su visita a Guadalupe
La Reina Letizia ha vuelto a demostrar que estilo y simbolismo no están reñidos. En su reciente visita institucional a Cataluña, con paradas en Montserrat y Badía del Vallès, la monarca ha apostado por una fórmula que ya le conocemos, pero que no deja de resultar efectiva: recuperar piezas de su armario y actualizarlas con accesorios nuevos y cuidadosamente escogidos.
El vestido denim que ya es un clásico moderno
Para la conmemoración del milenario del Monasterio de Montserrat, la reina Letizia ha recuperado un vestido de Carolina Herrera que ya estrenó el pasado septiembre. Se trata de una pieza confeccionada en tela vaquera estructurada, con corte midi, sin mangas y marcada cintura. Aunque el denim se asocia comúnmente a lo informal, en este caso se transforma en una prenda de alta presencia, perfecta para equilibrar el respeto institucional con un toque de modernidad.
Un rojo que no pasa desapercibido
La Reina ha dado un paso más en su combinación ganadora al incorporar un nuevo par de zapatos de la firma francesa Sézane. El modelo Paula, unas merceditas rojas de tacón sensato y diseño retro, ha aportado el contraste cromático justo para revitalizar el look sin romper su armonía. Este guiño al color no solo ha añadído dinamismo, sino que ha remarcado su capacidad para jugar con los accesorios como auténticos mensajes visuales.
Accesorios que cuentan una historia
Letizia ha completado su estilismo con un bolso de Olivia Mareque, elaborado en piel vegana de color rojo, ya lucido anteriormente por la princesa Leonor. En cuanto a las joyas, ha sorprendido con unos pendientes nuevos de Pertegaz, de diseño geométrico en plata bañada en oro. Su silueta moderna encajaba a la perfección con el equilibrio estructural del vestido.
Estilo con mensaje
Más allá de la moda, la Reina Letizia parece tener claro que cada elección estilística, por mínima que sea, comunica. En esta ocasión, ha vuelto a mostrarse fiel a su filosofía: sostenibilidad, reutilización inteligente, diseño español y pinceladas internacionales. Y todo ello sin perder ni un ápice de elegancia ni de intención.
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