Ferrero explica su ruptura con Alcaraz, habla del desgaste emocional y deja abierta la puerta al futuro.
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Carlos Alcaraz en “El Hormiguero·: «No he tenido tiempo de asimilar todo lo que he conseguido»
Una semana después de hacerse oficial el final de su etapa junto a Carlos Alcaraz, Juan Carlos Ferrero ha decidido hablar. El extenista y entrenador valenciano rompe su silencio para explicar los motivos de una separación que ha sorprendido al mundo del tenis, tras casi ocho años de trabajo conjunto y una carrera plagada de éxitos. En entrevistas concedidas a Marca y El País, Ferrero se muestra sincero, dolido y reflexivo, pero también sereno. La ruptura, asegura, pudo evitarse.
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El adiós a una relación de ocho años
Ferrero reconoce que el final no ha sido fácil. “Ahora mismo yo estoy dolido. Estas relaciones son complicadas de dejar de un día para otro. Y tiene que pasar un tiempo de duelo”, confiesa. Pese a ello, asegura quedarse con la tranquilidad de haberlo dado todo: “Me quedo con una sensación de tranquilidad, de haber hecho los deberes”.
Según explica, la ruptura llega tras no alcanzar un acuerdo en la revisión contractual de cara a la próxima temporada. “Había ciertas cosas en las que no estábamos de acuerdo”, señala, dejando claro que ambas partes defendían sus propios intereses. “Desde el entorno de Carlos piensan en lo mejor para él y yo desde el mío en lo mejor para mí”.
Ferrero admite que el desenlace pudo ser distinto: “Puede ser que se hubieran podido salvar si nos hubiéramos sentado a hablar, pero al final no nos hemos sentado y hemos decidido no seguir”.
El factor económico, no decisivo
Ante las informaciones que apuntaban a diferencias económicas como principal motivo, Ferrero es tajante. “Se ha podido llegar a comentar el tema económico, pero no era el motivo por el que yo estaba en este proyecto”. Y añade: “He demostrado desde muy joven que no era para mí lo más importante”.
¿Qué papel tuvo Carlos Alcaraz en la ruptura con Juan Carlos Ferrero?
Juan Carlos Ferrero asegura que habló directamente con el Carlos Alcaraz antes de tomar la decisión. “Hablé con él antes para preguntarle si estaba al corriente de todo y me dijo que sí”. A partir de ahí, explica, dejó las negociaciones en manos del equipo: “A él lo dejé de lado porque entendí que estaba al corriente de todo”. Desde El País, matiza: “Carlos era consciente de por dónde iba todo, pero es una decisión de equipo”.
Una relación profesional… y emocional
El entrenador valenciano hace balance de una etapa que define como profundamente positiva. “Mi experiencia como entrenador de Carlos ha sido muy buena y no podría decir que ha habido algo negativo”. Especialmente recuerda los primeros años: “Fue un periodo muy bonito en el que compartimos muchísimos momentos juntos”.
Ferrero no esconde que la separación tendrá impacto emocional: “Supongo que también me dolerá cuando lo vea jugar en los torneos. Ahí entran muchas experiencias vividas”.
El relevo y el futuro
Sobre Samu López, nuevo entrenador principal de Alcaraz, Ferrero se muestra generoso: “No hay que ser egoísta y hay que ser comprensivo, aunque no puedo decir que no duele”. Confía plenamente en su capacidad y en la del tenista murciano para superar esta etapa: “Creo que Carlos es capaz de superar esto e ir realmente con muy buen nivel a Australia”. En cuanto a su futuro, Ferrero pide calma:
“Necesito dos o tres meses de estar tranquilo y que pase el dolor”.
¿Un reencuentro algún día?
Lejos de cerrar la puerta, Ferrero deja una frase que resume el vínculo entre ambos: “Cerrar la puerta definitivamente no sería lógico ni con él ni con el equipo”.
Y concluye con un deseo sincero: “Yo le deseo a Carlos lo mejor y creo que tiene posibilidades de ser el mejor tenista de la historia”.

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