El posado con David genera debate sobre dinero, paternidad y la relación cordial de los padres. Gabriela Guillén confirma que cobró por la exclusiva con David, mientras Bertín Osborne asegura que no recibió dinero.
Bertín Osborne y Gabriela Guillén muestran a su hijo y apuestan por normalizar su relación
El posado en forma de exclusiva de Bertín Osborne con su hijo David, fruto de su relación con Gabriela Guillén, ha vuelto a encender los focos sobre la familia del cantante y presentador. La portada de la revista ‘¡Hola!’ mostró al artista junto a su hijo, generando opiniones encontradas entre los seguidores y la prensa del corazón. La polémica no tardó en surgir: mientras Bertín negó haber recibido dinero por el reportaje, Gabriela confirmó que sí hubo beneficio económico, destinado íntegramente al menor.
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La situación revive antiguos desencuentros entre los padres. Desde el nacimiento de David, Bertín se había mostrado reacio a reconocerlo, y la madre tuvo que recurrir a los tribunales para lograr el reconocimiento legal de paternidad. Tras meses de disputas, el encuentro mediático de padre e hijo busca normalizar la relación y dar visibilidad al pequeño, que hasta ahora había permanecido en segundo plano.
Contradicciones y aclaraciones
Gabriela Guillén ha explicado que la propuesta del posado surgió de la revista, y que tanto ella como Bertín acordaron aceptar la oferta. “Evidentemente, el beneficio de todo esto es para nuestro hijo”, subraya la madre del pequeño, insistiendo en que la remuneración no fue un objetivo personal sino un recurso para garantizar el bienestar del niño.
Por su parte, Bertín Osborne mantiene que él no cobró nada por la exclusiva. En declaraciones a diversos medios, se mostró indignado ante las acusaciones de supuesta mercantilización del menor y enfatizó que su decisión de aparecer con David fue exclusivamente por cariño y justicia hacia el niño: “No quiero que mi hijo sea un escondido”, afirmó. La revista también emitió un comunicado respaldando la versión de Bertín, aclarando que no hubo pago a su nombre.
El dinero detrás de la portada
Según informaron algunos medios, Gabriela habría percibido un 10% del total del acuerdo económico, estimado en torno a 65.000 euros. La madre explicó que la cifra representa solo un pequeño beneficio destinado al menor, y que los detalles contractuales están protegidos por acuerdos legales. “Hemos decidido los dos hacer esto de mutuo acuerdo. No hay más”, remarca Guillén.
El debate sobre el dinero ha eclipsado, en cierta medida, el objetivo principal: que David pueda disfrutar de una relación visible con su padre y conocer a sus hermanos. Gabriela subraya que la intención era dar normalidad a la situación familiar, no lucrarse con ella. “Lo que queríamos era que nuestro hijo tenga derecho a ser visto y a tener una relación cercana con su padre”, concluye.
Una relación que se reconstruye
Tras meses de conflictos legales y disputas mediáticas, Bertín y Gabriela parecen haber encontrado un terreno común. El cantante y su hijo han pasado tiempo juntos en la finca familiar, y Gabriela asegura que no existe problema en que David conozca a sus hermanos mayores. La madre insiste en que no hay intención de protagonismo mediático, sino de garantizar que el pequeño tenga una vida lo más normal posible.
Aunque las medidas económicas y de manutención del menor aún deben formalizarse ante el juzgado, ambos progenitores coinciden en la importancia de mantener una relación cordial y respetuosa por el bien del niño. Este episodio mediático, lejos de ser solo un posado, se ha convertido en un símbolo del complicado equilibrio entre privacidad, derechos del menor y el interés de los medios.
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