La presentadora gallega Paloma Lago vive momentos difíciles tras una denuncia a Alfonso Villares que ha sacudido a la Xunta.
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El hasta ahora conselleiro do Mar, Alfonso Villares, anunció esta semana su dimisión tras ser informado de que está siendo investigado por un presunto delito de agresión sexual hacia Paloma Lago, la presentadora y modelo gallega interpuso la denuncia hace unos meses en un juzgado de Ferrol. Al tratarse entonces de un cargo aforado, el caso fue derivado al Tribunal Superior de Xustiza de Galicia.
Un conselleiro acusado de delito sexual non é un asunto privado, por iso Rueda ten que dar explicacións inmediatas no Parlamento.
Á espera de que a xustiza actúe, todo o apoio e solidariedade coa vítima, para a que pedimos o máximo respecto.https://t.co/DrrvLjAQpV— Ana Pontón (@anaponton) June 4, 2025
Villares defendió públicamente su inocencia y aseguró que da un paso atrás por responsabilidad, renunciando a su condición de aforado para afrontar el proceso como cualquier ciudadano. Su dimisión supone un terremoto político en la comunidad gallega, especialmente tras conocerse la identidad de la denunciante.
Reacciones políticas: entre la condena y la exigencia de explicaciones
Desde el BNG, primera fuerza de la oposición, se han mostrado contundentes. Su diputada Noa Presas calificó el caso como “de extrema gravedad” y pidió “explicaciones urgentes” al presidente de la Xunta, Alfonso Rueda. En la misma línea se pronunció el PSdeG, que valoró la dimisión pero recalcó que hechos así son inaceptables en responsables públicos.
El propio Rueda, por su parte, aseguró que respeta las decisiones judiciales y expresó su deseo de que “la justicia actúe con rapidez” para esclarecer los hechos.
Un pasado marcado por el engaño y el peligro
La denuncia contra Villares no es el único episodio difícil en la vida de Paloma Lago. Años atrás, fue víctima de una estafa millonaria perpetrada por un hombre que se hizo pasar por un príncipe saudí. El impostor no solo la engañó sentimental y económicamente, sino que, según relató la propia presentadora en su día, llegó a intentar asesinarla. Logró escapar del intento y el autor fue detenido y condenado.
Este suceso, aunque menos mediático que el actual, dejó una profunda huella en la comunicadora, que desde entonces ha advertido sobre el peligro de las estafas emocionales y los vínculos tóxicos que pueden desembocar en violencia.
Paloma Lago, una figura pública con raíces profundas en Galicia
Conocida por su elegancia en televisión desde los años 90, Paloma Lago ha sido un rostro habitual en la pequeña pantalla, participando en programas como ‘La noche de los castillo’s o ‘Telepasión española’. Más allá de su trayectoria profesional, su vida personal también ha estado bajo la mirada pública por su relación con Javier García Obregón, hermano de la actriz Ana Obregón, con quien tuvo un hijo.
En los últimos años, ha decidido volver a sus orígenes y residir en Ferrol, donde ha iniciado una etapa más tranquila, colaborando con medios locales y alejándose del foco mediático.
Un silencio mediático, una presión creciente
Por ahora, Paloma Lago decide no hacer declaraciones públicas sobre el caso. Personas cercanas cuentan que se siente emocionalmente desbordada y afronta esta situación con discreción, buscando proteger su intimidad. Mientras tanto, la investigación avanza y el público mantiene la atención fija en ella.
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