Nika revive momentos personales y laborales complejos que ha vivido, incluyendo su vínculo ambiguo con Alejandro Sanz.
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Nika, exconcursante de la segunda edición de Operación Triunfo, ha compartido detalles impactantes de su historia personal y artística en una reciente entrevista donde también ha mencionado a Alejandro Sanz. Con 45 años, la artista reflexiona sobre cómo ha sido navegar una industria que no siempre le jugó limpio, sobre todo en momentos vulnerables de su vida.
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Tras el fallecimiento de su madre y la separación del padre de su hija, la cantante asegura haber vivido varias situaciones desagradables con representantes que, lejos de mostrar un interés profesional, buscaron aprovecharse emocional y físicamente de ella. Esta amarga experiencia inspiró su nuevo sencillo, «Susi Okama», cuyo título juega con la provocadora pregunta “¿sushi o cama?”, dejando entrever lo que realmente le proponía uno de estos mánagers.
“Susi Okama”: una respuesta en forma de música
El nuevo tema no solo representa un desahogo personal, sino también una denuncia en clave artística. Nika ha dejado claro que quiso que la canción tuviera detalles evidentes y directos, con la intención de que quienes la hicieron sentir utilizada se reconocieran en la letra. Asegura que este tipo de situaciones se repitieron hasta en tres ocasiones durante un corto periodo, y que aún hoy le cuesta entender cómo hay quienes pueden aprovecharse del dolor ajeno.
«Ahora te lo cuento con una sonrisa pero fue un momento bastante doloroso para mí. Es frustrante como artista y como mujer», dijo la cantante.
El precio de la fama temprana
Su paso por OT 2 no solo le dio fama, sino también ciertas decepciones. Nika recordó cómo fue estafada en una campaña publicitaria donde, junto a su entonces pareja y compañero del concurso, Hugo Salazar, recibió un trato desigual. Mientras él cobraba más, la excusa fue tan simple como ofensiva: “porque es un chico”.
Aunque evita hablar directamente de Hugo, sí admite que esa relación fue perjudicial tanto a nivel emocional como profesional. Con el tiempo, dice mirar con tristeza a la joven que se enamoró sin reservas frente a millones de espectadores.
Un vínculo difuso con Alejandro Sanz
Otro de los nombres que han salido a la luz es el de Alejandro Sanz. Nika lo conoció cuando tenía solo 15 años, durante un concierto en Puerto Rico al que asistió con su padre. Años más tarde, entablaron una relación cercana, aunque la cantante se muestra prudente sobre el tipo de vínculo que compartieron.
A pesar de la aparente conexión, Sanz nunca intervino en su carrera. “Me dijo que debía ganármelo yo sola”, recuerda Nika, quien considera justa esa postura. Aunque reconoce que su relación con él no fue exclusivamente profesional, prefiere no profundizar más: “Y hasta aquí”, zanjó. Según reveló, llevan 13 años sin tener contacto alguno.
Independencia ganada con esfuerzo
Nika enfatiza que todo lo que ha conseguido ha sido por mérito propio. A pesar de haber tenido la oportunidad de contar con figuras influyentes cerca, optó por seguir su camino en solitario. Hoy, desde una perspectiva más madura, rescata su resiliencia y valentía en un entorno complicado.
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