La histórica bodega redefine su identidad visual con una imagen más elegante, sin perder su esencia.
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Palacio de Bornos estrena una nueva etapa con el rediseño de su identidad visual, una evolución que respeta su historia pero se proyecta con fuerza hacia el futuro. La bodega, referencia en la D.O. Rueda, ha mantenido su característico binomio cromático —naranja y negro—, pero lo ha reinterpretado con una estética más refinada, limpia y actual, alineada con el carácter y la ambición que define a cada uno de sus vinos.
Inspirada en el legado del movimiento Arts & Crafts y en la figura de William Morris, la nueva imagen rinde homenaje a las raíces palaciegas de la marca, introduciendo detalles gráficos que evocan elegancia y sofisticación. El resultado es una identidad que equilibra a la perfección el respeto por la tradición con un lenguaje visual plenamente contemporáneo.
Esta renovación estética cobra vida en las cinco etiquetas protagonistas de la gama:
Palacio de Bornos Verdejo
Fresco y expresivo, conjuga notas florales, frutales y herbáceas con una acidez vibrante que lo convierte en un blanco refrescante y versátil.
Palacio de Bornos Sauvignon Blanc
Seduce por su intensidad aromática, con toques tropicales y herbáceos, y una boca equilibrada, untuosa y persistente.
Palacio de Bornos Verdejo Fermentado en Barrica
Sorprende por su complejidad y estructura. Las notas de vainilla y ahumados se integran con la fruta en un vino largo, elegante y envolvente.
Palacio de Bornos La Caprichosa
Procedente de viñas viejas y con crianza sobre lías, ofrece un perfil profundo, especiado y mineral. Su paso por boca es potente y armonioso, con un final largo y redondo.
Palacio de Bornos Semidulce
Destaca por su delicado equilibrio entre dulzor y frescura. Su aroma intenso y su textura golosa lo hacen ideal para maridar aperitivos o postres.
Durante la presentación de esta renovada imagen, la bodega apostó por una puesta en escena sensorial, donde la música tuvo un papel destacado. El violinista Manuel Urios Hernández interpretó piezas cuidadosamente seleccionadas para acompañar la degustación, aportando una dimensión emocional a la experiencia, en línea con el compromiso de Bornos con el maridaje entre vino y música, presente desde hace años en su proyecto Bornos Sound.
Con esta transformación, Palacio de Bornos reafirma su vocación de seguir innovando sin perder su identidad. Una imagen renovada que habla del pasado con lenguaje de futuro, reflejando lo que es hoy esta bodega: un referente con historia, elegancia y visión.
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